¡NOS QUEDA MUCHO POR CONOCER, DÉJATE LLEVAR POR LA SERENDIPIA!
Este vídeo nos hace pensar mucho sobre el concepto de tiempo, cómo lo aprovechamos individualmente y cómo hemos sido capaces de enmarcarlo y utilizarlo para marcar los acontecimientos de la vida.
El tiempo influye en toda nuestra vida siempre y nos permite separar momentos y hacer que sean recuerdos o experiencias. Debemos aprender a organizarlo, a compartirlo, a disfrutarlo y aprovecharlo con detalles y acciones que realmente nos llenan de energía y vitalidad.
Nosotras vamos a darle una pequeña vuelta de tuerca a uno de los conceptos del vídeo Slow Life; es completamente cierto que nos tiene que quedar tiempo para la vida familiar después de nuestros mil quehaceres, pero para nosotras lo más importante es que tiene que quedar tiempo para uno mismo, para realizar lo que realmente queremos y así sacarle el máximo partido a la vida estemos donde estemos.
Otro tema muy importante a tratar tras ver el vídeo es la sociedad.
La sociedad nos ha cerrado, controlamos nuestro tiempo por y para rendir en lo que conocemos como tareas cotidianas o trabajo, dando lugar a la frase tan utilizada hoy en día: "No tengo tiempo". Cada uno debe tener su propio tiempo, para avanzar individualmente como persona, y para no simplemente vivir, si no estar viviendo.
En este vídeo así lo expresa perfectamente el catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid, Carlos Montes, que propone romper con los tiempos establecidos entre humanos y naturaleza, ya que la misma naturaleza impone su tiempo.
Siempre buscamos la eficacia y la rapidez, conseguir el éxito al instante. Enlazando con este concepto tenemos el tema de los medios de comunicación (uno de los tantos temas de los que podríamos hablar en cuanto a sociedad), los cuales nos hacen tener una vida vacía, nos hacen preocuparnos o darle importancia a cosas que realmente no son relevantes en nuestra vida, simplemente son distracciones, y también nos hacen ver que se puede conseguir todo al momento (y más ahora, ya que vivimos en una sociedad consumista), cuando siempre es necesario un poco de esfuerzo, y con esfuerzo te sientes realmente bien en la mayoría de ocasiones.
El movimiento Slow incita a la vida tranquila, a dejarse llevar, no tener que fijarse meramente en el final o la meta que tenemos propuesta, si no también a disfrutar del camino que recorremos hasta llegar allí. Este camino es bonito si tú realmente lo deseas, porque nadie más que tú es dueño de su propio tiempo y es capaz de distribuirlo mejor que tú. Tú sabes cómo llenarte de vida, tú realizas el movimiento Slow tal y como surge TU VIDA.
